Palabras más, palabras menos, con frecuencia recibo mensajes de ese tipo de potenciales clientes.
- "Hace un tiempo te consulté sobre.... y quiero..."
- "Leí todo en tu sitio Web y ya estoy lista para..."
En Internet la gente tiende a hacer compras pensadas, en lugar de compras por impulso.
Recopilan información, piensan en lo que necesitan, asignan prioridades. Finalmente se ponen en contacto, listos para actuar.
Para ayudarles en ese proceso:
1) Hazte recordable y encontrable
Los nombres de negocios -y productos- fáciles de memorizar, aparecer en Google, y links y datos de contacto en tu sitio Web, son una buena ayuda. Realmente es un problema cuando los clientes se deciden a comprar y sólo encuentran a tus competidores.
2) Mantén un contacto frecuente
Puede ser vía publicidad tradicional, un boletín electrónico semanal, autoresponders o llamadas de seguimiento para todos los que alguna vez pidieron información.
3) Conoce los motivos
Pregúntales a aquellos que te contrataron o compraron, qué fue lo que los hizo seguiradelante. Usa sus respuestas para incorporar ideas a tu marketing, de manera de acortar el tiempo de futuros clientes desde el momento en que comiencen a pensar en comprar hasta la hora en que lo harán.
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